Hablemos de trabajo
En relación con el pasado 1 de mayo, en el que se conmemora el Día Internacional del Trabajo, es importante tomarnos un momento para reflexionar sobre el papel que el trabajo representa según su función social y económica.
Es importante considerar al empleo y la posibilidad de trabajar como acciones útiles en pro de los intereses empresariales, pero que, a la vez, proveen una fuente de satisfacción para los trabajadores y seguir los lineamientos de la legislación laboral de acuerdo con las leyes locales. Estos tres aspectos aseguran un empleo digno, productivo para la empresa, proveyendo un marco de desarrollo para el empleo sostenible.
Tomando en cuenta estos aspectos, se busca incentivar el desarrollo de buenas prácticas empresariales, que, por medio de la generación de empleo, promuevan escenarios de beneficio para todos los actores involucrados, pues la dignificación de los trabajadores, acompañados de buenas prácticas de gestión humana, permite generar estabilidad laboral y evitar la rotación de personal, aumentar la productividad – un trabajador feliz es un trabajador productivo – y generar ambientes de trabajo saludables.
Estas prácticas han aumentado en América Latina y alrededor del mundo, permitiendo identificar las bondades de las relaciones laborales desde esta visión integral como un elemento que genera valor al ámbito empresarial. Pero, para alcanzar estos escenarios es necesario contar con un marco de acción estratégico que permita mantener o transformar las prácticas de una empresa para alcanzar su máximo potencial.
Tax and Labor